Hoy analizando mi vida después de una corta visita al hospital, después de haber llorado de dolor y de impotencia he descubierto que estoy llena de miedos y que estos me perjudican a mí y a quienes me rodean.
Hoy he descubierto que siempre he temido:
• A la gente mala
• A Las mentes envidiosas
• A aquellos que disfrutan del dolor ajeno
• A quedarme sola
• A morir sin estar en paz con Dios
• A no encontrar la luz en medio de la oscuridad que muchas veces me rodea
• A cometer los mismos errores
• A perder mis sentimientos
• A dejar de sentir compasión por mi prójimo
• A la guerra
• A no valorar lo mucho o poco que poseo
• A no sentirme fuerte y capacitada para derribar los obstáculos que se me presentan cada día
• A que me hagan daño
• A hacer daño
• A no ser libre
• A perder a mis seres queridos
• A la maldad
• A mi misma :(
Estos son algunos de esos miedos que corren libres por mi interior y que se alimentan de cada “NO PUEDO” y de cada “ES IMPOSIBLE” que sale de mi boca.
No creo que sentir miedo sea malo, lo malo es que muchas veces dejo que el miedo me supere y me hace sentir inútil y desvalida.
Hoy descubrí que no soy la mujer valiente y decidida que siempre he creído ser y ese es mi mayor miedo.
Hola Diana!
ResponderEliminarTe cuento que hace dos años descubrí que hay dos tipos de miedos, de los buenos y de los malos y que ambos se retroalimentan. Te preguntaras como los descubrí, primero, sintiendo un miedo de la puta madre que creía que me llevaba puesta y que me inmovilizaba ante la realidad. Segundo, cuando un shaman me conto esto de los miedos, aprendí a tenerlos enfrente, preguntarme que cosas ganaba que cosas perdía, a sincerarme conmigo misma si era lo que realmente quería. Sigo teniendo muchísimo miedo pero aprendí a vivir con él, y ahora vamos juntos de la mano, equivocándonos, aprendiendo y riéndonos mucho.Te digo que no lo suelto que caminamos juntos y cuando se me retoba demasiado le aprieto la mano fuerte, nos vamos midiendo y enseguida como si el miedo estuviese vestido de fucsia pasa a un rosa medio, a un rosa pálido ..y así he aprendido que los miedos son buenos!
que somos nosotras las los volvemos buenos!
Abrazo rande Princesa!
Tener miedo no hace que dejes de ser la mujer valiente y decidida que eres, el que los aceptes es la prueba fehaciente de ello. Lo que demuestra la valentía es saber enfrentarse a ellos, a aceptarlos y a no verlos como algo malo, sino como algo que nos ayuda a vivir con nosotras mismas, a conocernos mejor y por sobre todo, evitar lo que nos hace daño. Si no temiéramos, cualquier cosa nos podría hacer daño pues no tendríamos aquel instinto que nos provoca el miedo para alejarlo.
ResponderEliminarUn abrazo telepático
Nos leemos