7 de mayo de 2011

NO TODO ES COLOR ROSA

Primer beso

—"¿Quién es ella?"— preguntaron sus hermanos, mientras lo veían observarla detenidamente, siempre le sucede le mismo cuando ella llega a las grabaciones de la película donde los dos son protagonistas.
Él es Yaten Kou, actor, modelo y cantante; quien junto con sus hermanos integra el grupo musical Three Ligths.

—"Esa es tu coprotagonista, debes de disfrutar mucho de tener a esa belleza en tus brazos, oh hermanito que envidia te tengo"— comentó risueño uno de sus hermanos, Seiya Kou, prestigioso modelo y guitarrista.

—"No puede ser ella, el enano éste dijo que era muy fea, antipática y que usaba unos lentes horrendos; y si mis ojos no me engañan lo que veo es una diosa con una encantadora sonrisa"— Dijo el mayor de los tres Taiki Kou quien además de pertenecer al grupo es un reconocido empresario dedicado al entretenimiento y grandes espectáculos.

—"Ella es Minako Aino "la hiena" y no estoy interesado en ella, ok"— duras palabras que salieron de la boca de Yaten con más volumen del que el hubiese deseado y que no pasaron desapercibidas por la fémina en cuestión.
Siempre era lo mismo, después de dos meses de trabajar juntos y él no tenía para ella una sola palabra cordial.

—"Buenos días, Yaten"— la chica en cuestión lo saludó amablemente, como siempre lo hacía; pasó por su lado tratando de disimular el malestar que le causo escuchar sus palabras.



El que ella fuera tenaz, dedicada en su trabajo y que no tolerara la mediocridad en lo que hacía, la hicieron merecedora de su apodo "La hiena", nunca fue la mejor estudiante, tampoco era la más bonita, sus sobresalientes curvas siempre la metieron en problemas y aun hoy con sus 23 años se los causaban; siempre se esfuerza por tener buenas relaciones laborales pero nunca lo consigue, no es una chica antipática como muchas notas amarillistas le hacen creer a sus fanáticos, solo es muy reservada y su vida privada es la principal razón para no conceder entrevistas, además a quien le podría interesar saber que no tiene familia, que sólo cuenta con sus amigas y que vive en un pequeño dúplex en la zona rural de la ciudad acompañada de su gato.

Oh si, ella "la hiena" es de esas chicas que acarician a su gato tardes enteras viendo una tonta película romántica.

—"Empezamos por favor, hoy trataremos de terminar la escena de la habitación"— dijo el director con voz cansina, esa escena en particular la llevaban preparando mas de dos semanas y no la podían terminar por que los chicos no querían besarse apasionadamente.

Cuando Minako salió de su camerino, ataviada en un pequeño camisón negro de seda que dejaba al descubierto sus exuberantes curvas, Yaten hacia lo mismo del suyo sin camisa y sólo con un pantalón de pijama de seda azul oscura. Sus miradas se conectaron por un instante y es como si una explosión estelar hubiese sucedido.

Recostada en una hermosa cama tamaño King de dosel purpura se ve a una mujer cubierta por una sabana rosa pálido, que deja al descubierto el inicio de sus caderas, sus cabellos rubios están esparcidos en toda la almohada, su respiración es tranquila, está dormida…, un grito interrumpe la escena. "ACCIÓN". A la habitación entra un hombre de cabellos color plata y ojos esmeraldas; está enojado, su ceño fruncido lo delata. Mira a la bella mujer que está dormida, se acerca sigiloso a ella y con una tierna caricia recorre su rostro, para luego terminar en un puño apretado, retirándola inmediatamente del rostro sereno de aquella muchacha.

"John", susurra ella en medio de un sueño que parece perturbarla "¿Por qué él, por qué siempre lo llamas a él? soy yo, mírame, soy él mismo hombre que adornó tu dedo con ese anillo, soy yo el que está a tu lado, a mí fue al que prometiste amar" dice el hombre con un tono que deja ver su frustración y resentimiento hacia la mujer.

Ella se remueve en la cama, parece despertar y sus ojos tranquilos recorren al hombre que está de pie junto a la ventana. "Ryan", llama al hombre en un susurro, este no parece escucharla. La mujer se levanta y va a su lado "Ryan, amor, ¿Estás bien?" pregunta acariciando suavemente el brazo del hombre, que voltea y la mira lleno de ira, "siempre lo llamas a él", la mujer parece no entender; "sí, en tus sueños siempre llamas a John, entonces dime ¿cómo crees que estoy cuando la mujer que supuestamente juro amarme hasta el final de mis días, sueña con otro?, respóndeme".

Una lágrima cae suavemente por el rostro de ella, quien mira al hombre con ternura y amor reflejados en sus ojos, "Te amo" susurra antes de levantarse en puntitas y depositar un tierno beso en los labios del hombre.

Al otro lado de la habitación se ve a un hombre apretando fuertemente un montón de papeles y susurrando "pasión, pasión, pasión" como si fuera su mantra particular. Entonces, como por arte de magia, la escena del beso entre un hombre airado y una tierna mujer se torna apasionada, el beso pasa de ser delicado a un beso demandante, las caricias se suman a la escena y la cama pasa a tomar el protagonismo cuando los dos jóvenes actores la ocupa. Las caricias se tornan demandantes y de nuevo un grito interrumpe la escena -"CORTEN"-

Los actores: Minako y Yaten, parecen no haber escuchado el llamado del director para terminar la escena, ya que continúan sumergidos en un beso que no tiene nada de ficticio. Alguien aclara su garganta fuertemente y los chicos salen de su letargo. Minako esta sonrojada, se acomoda la pequeña bata y corre a su camerino; Yaten no comprende lo que le pasó cuando probó los dulces labios de la mujer que a su modo de ver era la más detestable de todas. Así que, entre miradas sospechosas y risas por parte de sus hermanos, llega a su camerino y azota la puerta.

—"Minako a escena"— dice Rei Hino –su asistente personal y mejor amiga– desde la puerta de su camerino, la chica no responde, Rei ingresa a éste y lo que ve la deja sorprendida: Minako recostada en el sofá, en posición fetal e, incomprensiblemente, cientos de lágrimas caen humedeciendo su rostro.

—"Mina por Dios, levántate, mira que te están esperando para terminar de grabar lo que tenían programado para el día de hoy"— Minako no respondió y Rei siguió con su cháchara.

—"¿O me dirás que estás así por el beso?" Un simple beso no tendría por qué ponerte así, si te han dado miles de esos, ¿qué tiene este de especial?"—
—"Fue mi primer beso"— susurró Minako, acariciando sus labios —"Él me dio mi primer beso".

Rei no daba crédito a lo que escuchaba, ¿cómo que primer beso? ¿De qué estaba hablando Minako? ¿Seria posible que a sus 23 años ningún hombre la hubiese besado?

—"Mina, cariño, ¿De qué hablas?"— formuló la pregunta con temor por la reacción de su amiga.

—"De que Yaten Kou me beso a mí, no a Susan"— dijo suavemente, mientras pasaba los dedos por sus labios; quizá absorta en aquel recuerdo latente.

Un nuevo llamado a la puerta por parte del director sobresalto a los dos chicas que después de semejante confesión quedaron sumidas en un silencio total.

Disclaimer: los personajes de esta historia le pertenecen a Naoko Takeuchi, yo solo los uso para mi deleite personal jeje

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